La basílica del Sacré Coeur está situada en una colina en el corazón del famoso barrio Montmartre. Según una leyenda, en el lugar que hoy ocupa la basílica, se decapitó en el 250 a.C. al primer obispo de París, Saint Denis, y de ahí su nombre Montmartre, que significa Monte del Martirio.
Basílica del Sagrado Corazón – Sacré Coeur de París
Al parecer y a pesar de la leyenda existía ya una primitiva capilla dedicada al Sagrado Corazón en el lugar, y hasta 1876 no se empezó a construir la basílica actual, que se terminó en 1914.
El edificio de la basílica está inspirado en la arquitectura romana y bizantina y el Domo principal (cúpula) tiene una altura de 80 metros.
El interior de la basílica no tiene un interés especial, aunque la visita al lugar es obligada.
Para ascender a la colina podemos utilizar el Funicular pagando un ticket, o subir gratis pero a pie, los más de 300 escalones que nos separan de la basílica.
Además de conocer la basílica del Sacré Coeur y sus vistas, es muy recomendable pasear por el barrio de Montmartre, que tuvo una gran actividad artística y cultural entre 1870 y 1914. En sus cafés se reunían artistas, pintores, escultores, el mismo Picasso vivió aquí.
Otra de las características del barrio es su erotismo con numerosos cabarets que aún ofrecen espectáculos, como el célebre Moulin Rouge, del que en actualidad, sólo sus aspas son reales.