La ministra de Energía y Medio Ambiente de Francia ha dado a conocer una propuesta para que las luces internas y externas de comercios, oficinas y edificios públicos (ubicados entre el local de Louis Vuitton y el cabaret Lido de la Avenue des Champs Élysées) permanezcan apagadas entre la 01:00 y las 07:00 horas a partir del próximo mes de julio.
El plan, que se llevará a cabo también en las ciudades y pueblos de Francia, pretende ahorrar energía y dinero. Sin embargo, ya han surgido varias voces discrepantes por parte de los comerciantes parisinos.
Estos comerciantes consideran que esa medida, que se suma a la prohibición ya existente de abrir los comercios los domingos y de realizar compras por la noche, afectará al sector turístico y comercial en unos momentos en que la economía francesa apenas ha crecido en un año y tiene la tasa de desempleo más alto de los últimos 14 años.
Asimismo, resulta posible que esta propuesta del gobierno francés afecte a la condición histórica de París de “La ville lumière” (La ciudad de la luz) que la capital anó tanto debido a su fama como centro de ideas durante el Iluminismo, como por su temprana adopción del alumbrado público.
El gobierno socialista del presidente François Hollande impulsa claramente la idea de apagar las luces la cual se había estudiado durante la gestión del ex presidente, Nicolas Sarkozy.
La idea de Sarkozy se enmarcaba en un plan europeo de mejorar un 20% la eficiencia energética para el año 2020. Su gobierno aprobó una medida que obligaba a los comercios y empresas a apagar las luces de neón con su nombre entre la 01:00 y las 06:00. Esto ya afectó a París de forma relevante.
La nueva medida perjudica todavía más según los comerciantes quien han llegado a afirmar que París se convertirá en un museo que se duerme al ponerse el sol.
Foto vía AmazingCities