París es una ciudad inmensa llena de lugares mágicos e interesantes. El turista suele conoce muchas cosas de la capital gala, pero hay otras que quedan en el tintero. Así, os dejo varios datos curiosos sobre la bella París.
1º. La entrada de la Catedral de Notre-Dame:
En una de sus portadas se puede ver una escultura de un santo que sostiene su cabeza. Es San Dionisio, primer obispo de París y evangelizador de la Galia que fue ajusticiado en la Île de la Cité por las autoridades de la ciudad.
Después de torturarlo, debía ser decapitado, pero según cuenta la leyenda, su cabeza no tocó el suelo, sino San Dionosio la cogió y paseó atravesando Montmartre y lo que actualmente se conoce como calle de los mártires, hasta dar su cabeza a mujer piadosa con el fin de que la enterrase. Se la dió justo donde después se alzó la iglesia de Saint Denis.
2º. Las paredes de cristal de la Sainte Chapelle:
La Sainte Chapelle es famosa por sus espléndida vidrieras, que cubren en dos tercios de su totalidad los muros de este templo cataólico. Un prodigio de la ingeniería gótica de la Baja Edad Media logró aligerar los muros para posibilitar la entrada de la luz procedente del exterior y recubrirlo con el brillo de los cristales de colores. Resulta un espectáculo maravilloso y único en el mundo.
3º. Puesta de sol en el Arco del Triunfo:
Dos veces cada año entre el 10 de mayo y el 1 de agosto, la puesta de sol coincide exactamente con el eje que marca los Campos Elíseos, con lo que desde ellos y el sol aparece encerrado en el interior del Arco del Triunfo componiendo una magnífica postal.
4º. La guillotina en la plaza de la Concordia:
En esta plaza parisina se instaló la guillotina durante la Revolución Francesa. Aquí murieron reyes, aristócratas, burgueses y gente corriente en plena locura revolucionaria. Hoy en día, se puede observa una guillotina en un bar de la orilla izquierda, La Guillotine Pub (52, rue Galande).
Foto vía La Alacena de Ideas