El Canal de l’Ourcq forma parte de la red de canales parisinos. Tomando su fuente en el Ourcq, el curso llega hasta el barrio de la Villette, en el este de la capital de Francia. Permite llevar a cabo varias actividades de ocio sobre sus riberas y, a largo plazo, el transporte fluvial.
Estas vías de agua de 110 kilómetros con diez esclusas se componen tres tramos diferentes, que ofrecen un notable patrimonio técnico e histórico integrado en un entorno variado.
La dársena de la Villette y el canal de gran gálibo
Itinerario de más de 10 kilómetros sin esclusas, esta parte del canal, quitando la dársena de la Villette en plena evolución, presenta un marcado carácter industrial con cuatro puertos de flete: el puerto Sérurier, el de Pantin, el de Bondy y el de Pavillons sous-Bois.
El canal de pequeño gálibo de Pavillons-sous-Bois en Mareuil-sur-Ourcq
Con un itinerario de más de 90 kilómetros, era surcado por embarcaciones específicas: los filibotes y semifilibotes de Ourcq. Estos barcos contaban con una carga de cuarenta y cinco y de noventa toneladas. Sni embargo, ya no respondían a las necesidades económicas modernas. Cesaron su actividad en 1962. Así, desde 1983, la navegación de recreo individual pasó a ocupar las aguas de este canal.
Aguas arriba de Aulnay-sous-Bois, el paisaje deja de ser industrial ya que el canal atraviesa el parque forestal de Sevran. Luego, se accede a un sector bordeado de plantaciones de alineación muy maltratadas por el temporal de diciembre de 1999, antes de llegar a un recorrido más sinuoso a través de espacios verdes y zonas rurales.
El río canalizado, desde Mareuil-sur-Ourcq hasta Port-aux-Perches
Este río, canalizado desde el siglo XVII, prolonga el canal otro diez kilómetros. Cuenta con cuatro esclusas. Es la parte del Ourcq que tiene los paisajes más singulares, sobre todo, en los alrededores de La Ferté-Milon Cuatro kilómetros más delante, finaliza la red con una última estación de agua en Silly-la-Poterie.
El Ourcq: un canal de excepción
Las instalaciones han sido totalmente modernizadas: las esclusas de Fresnes-sur-Marne, Vignely, Villenoy y Meaux en Seine-et-Marne ya se maniobran y pilotan con un terminal de mando. Además, , las fábricas de Trilbardou y Villers-les-Rigault han sido nombradas Monumentos históricos.
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