«Nº5 Culture Chanel » en el Palacio de Tokio

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Hasta el próximo 5 de junio se puede visitar  en  el Palacio de Tokio  la atractiva exposición «Nº 5 Culture  Chanel » , una muestra que aborda historia y los secretos de este reputado perfume que lanzó Gabrielle Chanel en el año 1921. Escogió el 5 porque para ella era un número de buena suerte. La fecha de inicio de la exposición tampoco resulta casual: el 5 del 5; ni de su conclusión, el 5 dej unio.

Como Catherine Denueve en la década de 1970, son numerosos los artistas y famosos que han unido su rostro al de la prestigiosa fragancia. Pero fue la mítica acrtiz  Marilyn Monroe la que hizo del perfume una leyenda para la posterioridad al afirmar en una entrevista que la única ropa que llevaba puesta en   la cama eran unas gotas de chanel Nº 5.

Se trata de una exposición sober un tema rodeado de secretos, como es un perfume. Así, un perfume en algo secreto, íntimo, personal para quiense los usan y lo viven. Un perfume define mucho a quien lo lleva.

La  columna vertebral  de esta gran muestra son 110 vitrinas transparentes en las que se pueden contemplar obras de arte, fotografías, libros y objetos ligados a la historia de este famoso perfume.

El recorrido arranca  en un jardín vertical, sembrado de jacintos, y finaliza en un taller que desgrana la composición del perfume N° 5 y el herbolario con las flores favorirtas de Coco Chanel.

Además, la escenografía de esta muestra  es minimalista: tres filas paralelas de vitrinas transparentes y rectangulares que rememoran el frasco del célebre perfume.

Cada vitrina  conduce a un juego de correspondencias en el que se descubren las diversas fuentes de inspiración de Coco Chanel, los hitos que marcaron su vida, sus lugares predilectos y los vínculos personales que tejió con los artistas de su tiempo.

Por otro lado, se desgranan sus recuerdos en el orfanato donde pasó sus primeros años de vida  y los de sus viajes a Italia o su mitología personal, en torno a personajes como Catalina de Médicis, la astrología, objetos y libros repletos de reminiscencias como el incensario o la Sagrada Biblia.

Por último, se pueden ver obras de arte, películas fotografías,  archivos y objetos preciosos provenientes  de los grandes museos internacionales o de colecciones privadas.

Foto vía Vanity Fair