Una exposición sobre los fotógrafos de América Latina

La fotografía latinoamericana llega a  la Fundación Cartier (261 Boulevard Raspail) con la exposición «América Latina 1960-2013. Photographies», que se centra en la relación entre el texto y la imagen. Está organizada en colaboración con el Museo Amparo de Puebla ( México).

La idea fue tomar un período bastante grande, de la década de 1960 y la Revolución cubana hasta la actualidad,  y escoger la relación entre texto e imagen como una entrada significativa  para descubrir la fotografía en América Latina. 

La finalidad no era realizar una muestra clásica sobre la historia de las últimas cinco décadas, o los mejores fotógrafos, sino una exposición que desde la imagen habla de una historia social y política.

De ahí que muchos autores famosos no figuren en ella y, al mismo tiempo, que se hayan podido presentar prácticas fotográficas muy variadas, de la fotografía documental al arte conceptual.

La cuestión pasa por  saber cuáles son los fotógrafos interesantes en relación con el tema elegido. Para ello se han reunido cerca de 500 obras de 73 autores, originarios de 11 países.

Desde sus cuatro secciones temáticas: Territorios, Ciudades, Informar-Denunciar y Memoria e Identidades, la muestra permite conocer varias generaciones de artistas hasta el 6 de abril de 2014.

Algunos son ya muy famosos,  como el mexicano Pablo Ortiz Monasterio (1952); el argentino Facundo de Zuviría (1954) y el español que vive  en Brasil Miguel Río Branco (1946).

Entre los conceptuales, sobresalen el  uruguayo Luis Camnitzer (1937), que redside en Nueva York; el argentino León Ferrari (1920-2013), el brasileño Antonio Manuel (1947), el colombiano Oscar Muñoz (1951) y la brasileña Rossângela Rennó.

Las jóvenes generaciones están representadas por artistas como los mexicanos Iñaki Bonillas (1981) y Maruch Sántiz Gómez (1975), la colombiana Rosario López (1970) y la venezolana Suwon Lee (1977).

Por último, hay que recordar que esta exposición sucede a la del escultor australiano Ron Mueck, que hasta fines de octubre recibió 300.000 visitantes y que desde haceu nos días  se expone en la Fundación Proa de Buenos Aires, antes de ir al Museo de Arte Moderno de Río de Janeiro.

Foto vía Fondation Cartier