Pasear, pasear y pasear. París no sólo es la Ciudad de la Luz, ni la de los enamorados, ni tantos otros tópicos que se os pudieran venir a la mente. Ciertos son, sí, no seremos nosotros quienes los pongamos en duda. Pero para llegar hasta...
Pasear, pasear y pasear. París no sólo es la Ciudad de la Luz, ni la de los enamorados, ni tantos otros tópicos que se os pudieran venir a la mente. Ciertos son, sí, no seremos nosotros quienes los pongamos en duda. Pero para llegar hasta...