Joel Meyerowitz fue el único fotógrafo que trabajó despuués los ataques del 11-S entre los escombros de la zona cero de Nueva York (Estados Unidos de Norteamérica). Las fotografías que Meyerowitz realizó del desescombro y la búsqueda de restos humanos en este lugar fueron publicadas en el libro » Aftermath» una excelente colección de 400 imágenes con retratos de crudo realismo y de elevada dignidad que condensaban el trabajo llevado a cabo allí durante varios días.
Además, este reputado fotográfo ha abordado todo tipo de temas en su obra. Así, se podrá ver una completa exposición en París titulada » Joel Meyerowitz, une rétrospective» que sirve para ver la importancia integral de toda su producción.
Esta exposición se puede visitar en el Maison Européene de la Photographie de París hasta el próximo 7 de abril. Si te gusta la fotografía no te debes perder esta muestra.
La exposición está compuesta por más de doscientas obras expuestas que aborda el comienzo de la obra de Meyerowitz cuando hizo fotos callejeras en el inicio de la década de 1960. Su pasión por la fotografía le llevo a dejar su trabajo como director creativo de una agencia de publicidad para dedicarse realizar fotografías del bullicioso y rico devenir diario de la ciudad de Nueva York.
Influido por la la pureza de Eugène Atget, la inspiración de Frank y los dictados sobre el momento decisivo de Henri Cartier-Bresson, Meyerowitz se unió al estilo documental de Gary Winogrand y el acercamiento más psicológico de Diane Arbus. De este modo, iba por las calles de La Gran Manzana tomando todo tipo de instantáneas.
En esta exposición parisina se puede ver como Meyerowitz se ha convertido en un maestro de la expresión cromática. Entre la década de 1960 y la década de 2000, la obra de Joel Meyerowitz se significa como el eslabón perdido que ayuda a entender la transición final del blanco y negro al color en la fotografía a partir de los años cincuenta del siglo XX.
Foto vía Phaidon