Los quesos son un producto donde los franceses han conseguido auténticas maravillas: Camembert, Roquefort, de cabra. Por lo general, las comidas terminan con un surtido de quesos que deben incluir como mínimo tres variedades. Aunque lo normal es que haya más de cinco.
Para cortar el queso se usa un cuchillo curvo con dos picos en el extremo. Son para coger el trozo deseado ya que no se debe utilizar el tenerdor. Sobra decir que siempre habrá que comenzar con los sabores más suaves para terminar con los azules.
Estos son los quesos más destacados que encontraras cuando comas en cualquier restaurante durante tu viaje a París:
1º. Bleu:
Queso blando de vaca, debe su nombre al color azulado que se produce en su interior al fermentar un moho llamado «penicilium glaucum». Uno de loos más populares es el Bleu d’Auverge. Otro son: Bleu de Bresse, Bleu des Causses, Bleu de Corse y Bleu de Quercy.
2º. Camembert:
De leche de vaca alcanza de un 40 a un 50% de materia grasa. La pasta interior es muy cremosa y la corteza de color blanco. Su procedencia es de la región de Normandía y nació durante los años de la Revolución Francesa.
3º. Roquefort:
Con denominacion de origen controlado es uno de los más antiguos. Ya era conocido en Roma a donde era llevado desde la ciudad que le da nombre en el departametne de Aveiron (Languedoc). Se fabrica con leche de oveja y se cura en las cuevas de una gran roca que hay en la zona.
4º. Cantal:
Procedente de Auvernia se elabora con leche de vaca (más del 45% de materia grasa). De pasta dura, presenta un color amarillento y su sabor es dulzón. Su peso puede oscilar entre los 5 y 50 kilos.
5º. Brie:
Queso blanco a base de leche de vaca y cuyo origen es la antigua provincia de Brie. Imitado en numerosos puntos, los más «originales» por su denominación de origen controlado son los de Brie de Meaux y Brie de Melun.
6º. Sainte Maure:
Queso de cabra de Touraine. Cremoso, tiene un sabor y olor muy particular. Se suele preparar en forma de cilindro de unso 15 centímetros de largo y 5 centímetros de diámetro.
Foto vía El Mundo