En la capital de Francia, el turista puede disfrutar de numerosos museos durante su viaje. Los hay de todo tipo, tamaños y formatos. En esta ocasión, os recomiendo visitar el Musée de la Vie Romantique, esto es, el Museo de la Vida Romántica.
Este singular museo se halla en el Hotel Scheffer-Renan, en el número 16 de la rue Chaptal. Abre todos los días de 10.00 a 18.00 horas, excepto los lunes y los festivos. La entrada general cuesta siete euros, si bien hay descuentos para varios colectivos. Además, el acceso a las colecciones permanentes es gratuita. Incluso cuenta con un notable servicio de audioguía.
El Museo de la Vida Romántica no se trata de un museo en el sentido académico del término. Se trata de una casa, un jardín, que muestran más de 150 años de vida de una familia inmersa en el mundo de las artes y las letras. En cuando uno entra en este lugar, el encanto resulta tan evidente que uno se deja llevar sin remedio.
En el año 1830, este sitio se erigió en la residencia de Ary Scheffer, un reputado pintor y escultor, quien decidió acondicionar dos talleres para trabajar y recibir a geniales artistas com Delacroix, Sand, Liszt, Dickens o Chopin. Luego, se convirtió en la residencia del filósofo Ernest Renan y su mujer, Cornelia Noémie. Y en el año 1983, los descientes tomaron la decisión de convertir su casa en este pintoresco museo que ahora podemos visitar en París.
Por otro lado, la planta baja del pabellón se dedica a George Sand. Se pueden varios recuerdos personales de Sand como acuarelas, mobiliario e incluso una pulsera hecha a mano por su propia hija. Además, en el salón, destaca un espectacular retrato de George Sand con un fondo musical de Chopin. En la primera planta, se exponenn varios retratos hechos por el dueño de la vivienda a diversos famosos de su tiempo.
Por último, a lo largo, el Musée de la Vie Romantique organiza un buen número de exposiciones temporales sobre el Romanticismo.