«Tatuadores, tatuados», una interesante exposición en el Museo del Quai Branly

Museo del Quai Branly en tatuadores, tatuados

La práctica ancestral de grabarse el cuerpo con objetivos punitivos, rituales o decorativos, que durante siglos se ha extendido por todo el mundo, se puede conocer en el Museo del Quai Branly en «Tatuadores, tatuados», la exposición más larga programada nunca en ese templo de la etnología de París.

Esta muestra se puede visitar  hasta el mes de  octubre de 2015. Los  comisarios  de la exposición son Anne & Julien, dos creativos polivalentes especialistas de la cultura popular y fundadores de la prestigiosa  revista «Hey!», que han concebido un «árbol genealógico» de las tendencias que dominan hoy en día  la escena del tatuaje y que se remontan, al menos, 5.000 años.

Así lo refleja el descubrimiento en 1991 del hombre de hielo de Ötzi, que murió congelado en la Edad de Bronce en lo que hoy son los Alpes italianos, con el cuerpo cubierto con 57 tatuajes, siglos antes de que ese tipo de dibujos aparecieran en los esclavos del antiguo Imperio romano.

No obstante, existen reliquias centenarias en casi todas las regiones del planeta, cuyos orígenes son con frecuencia  independientes pero que intercambiaron técnicas y estilos gracias al comercio marítimo, las invasiones o a la piratería.

La muestra se detiene después en varias regiones del mundo que han desarrollado diferentes estilos y técnicas excepcionales y expone esa evolución mediante 300 objetos entre los que se destacan  fotografías, dibujos, lienzos, herramientas, agujas, máscaras, vídeos y hasta pieles disecadas.

Uno de las secciones  se reserva  a Japón, donde los tatuajes nacieron como un castigo militar y con el paso del tiempo se transformaron en un colorido dibujo que cubre el cuerpo de las muñecas a las rodillas y que se asocia a la mafia yakuza. Otra sección aborda  los tatuajes  de Nueva Zelanda,  conocidos por los maoríes como «moko», y desarrollados como un dibujo curvilíneo antaño reservado a jefes guerreros y hoy en día  extendido por todo el mundo.

Por último, la muestra se centra en los grabados de Borneo, Filipinas, China, Samoa o los tatuajes chicanos de los barrios hispanos de Los Ángeles, al mismo tiempo que muestra piezas en papel y silicona diseñadas específicamente por varios de los maestros tatuadores como Leo Zulueta, Dong Dong, Steeve Looney o Filip Leu.

Foto vía El País