Las cerca de 80 piezas que el famoso maestro Cristóbal Balenciaga reunió de su propia obra en una suerte de «museo imaginario» y que alberga el centro Galliera de París se exponen en París.
Se trata de una exposición para rendir homenaje a Balenciaga con motivo del 40 aniversario de su muerte, deibdo que a que sigue siendo uno de los modistas más imporantes de la historia de la moda contemporánea. Y París es la capital mundial de la moda.
La muestra, que podrá verse hasta el próximo 7 de octubre, cubre un fondo muy particular donado en 1979 por su familia al museo Galliera. Son piezas elegidas por el creador para su propia documentación personal.
Constituida por prendas a veces suntuosas, a veces muy modestas, la colección incluye croquis, accesorios, fotografías y libros sobre moda, en un retrato exhaustivo de la obra de Balenciaga.
Este célebre modistas nos cuenta su concepción de la moda, caracterizada por una España tradicional y folclórica, en la que destaca su preferencia por el negro y colores oscuros, vestidos religiosos y de ceremonia.
Capas y abrigos en los que abundan los encajes, el terciopelo y el bolillo revelan su gusto por los regionalismos y por el traje popular español del siglo XIX, aunque también pueden admirarse vestidos de inspiración historicista que recuerdan a las obras de grandes maestros de la pintura española como Velázquez, Goya o Zurbarán.
El gusto por la cultura popular se aprecia, sobre todo, en los vestidos de corte andaluz, decorados con pequeños madroños en encaje, o en «boleros» (chaquetas cortas) cubiertas de lentejuelas y de pasamanería al estilo torero.
Por último, la muestra incluye además una treintena de enigmáticas piezas de las que una parte, en el momento de ser inventariadas, fue atribuida erróneamente al siglo XVIII, aunque en realidad pertenecía a la siguiente centuria.
Foto vía Mujer Hoy