Los parques de París

 Nunca antes había estado París tan verde como hoy en día. Ahora más que nunca los parisinos buscan un antídoto natural a los ruidos, el estrés y la contaminación. Actualmente más de 400 parques y jardines dan vida a la ciudad. Cada uno tiene su propio estilo y belleza.

Algunos de los parques son el recuerdo el pasado ilustre de la ciudad. Uno de ellos es el Jardin des Tuileries, concebido por Catilina de Médicis a finales del siglo XVI, aunque más tarde lo modificó el gran maestro jardinero de estilo francés, André Le Notre.

Por otro lado, el Jardín de Luxemburgo de María de Médicis ha cambiado muy poco desde principios del siglo XIX, a excepción de las obras que realizó Napoléon III en el huerto del Verger du Luxembourg.

Cuando Napoleón quiso convertir París en una ciudad residencial más acogedora, una de sus prioridades fue la creación de los jardines de Bois de Vincennes y Bois de Boulogne. Estos son los antiguos bosques de caza reales que rodeaban  París en la Edad Media y su aspecto salvaje y un poco descuidado hacen olvidar que uno se halla en la capital gala.

La arquitectura renancentista del presidente Miterrand en las décads de 1980 y 1990 revivió el interés por los jardines, con la creación de nuevos parques. Entre ellos se incluyen Les Halles, La Vilette, el Parc André Citröen y el Parc de Bercy. El más ambicioso es el futurista Parc André Citröen que fue construido en 1992 al lado de la vieja fábrica de coches de Citröen al suroeste de París.

Por último, nada mejor para finalizar el día que un trayecto a pie. Se recomienda acercarse a uno de los nuevos promenades (paseos) de la ciudad, el Musée de la Sculpture en Plein Air (Museo de la Escultura del Aire Libre), o el recorrido, más corto, entre el río Sena y el Jardin des Plantes, o tomar el viaducto Daumensil, apodado la senda verde, que va desde la Bastille hasta el Bois de Vincennes.

Foto vía Descubrir Paris